Capítulo
8: El
show de los meseros
Hoy
es un nuevo día, son las 10:00 PM y hay una fila ENORME para entrar al
aclamado Club Arcoiris. Ojo de Pez observa esto desde las ventanas de la
planta alta, y se siente plenamente feliz.
-¿Qué
decían de mi plan?-Pregunta el extraño ser azulado a las dos personas que
están junto a él.
-Felicidades,
no creí que lo lograrías-Dice Ojo de Tigre.
-¿Y
tú no vas a decir nada?-Pregunta Pez, a su otro amigo.
Ojo
de Águila simplemente observa a las chicas que se mueren por entrar al club,
y suspira, pues él esperaba mujeres de otro tipo.
-Demontres...Baah,
no importa. Algún día conquistaré a una mujer rica y dejaré esta asquerosa
vida...-Piensa el hombre de cabello rosado, sin hacerle mucho caso al
organizador del concurso.
-¡¡Son
tan guapos!!-Exclama Pez con emoción, pensando en los participantes que
llegaron al club hace media hora.
-Agghhh...-Murmura
Ojo de Tigre, mientras una gota de sudor resbala por su cabeza.
Ahora
veamos qué cosas raras suceden en la fila...
Sakura
Kinomoto y su amiga Tomoyo están por ahí. La niña de cabello morado sólo ríe
mientras graba a su amiga y Sakura no puede evitar sentirse avergonzada. Kero
vuela a su alrededor, y exclama:
-¡Pero
qué bien te ves!
-¿En
serio?-Murmura la pequeña Kinomoto, ruborizada, pues Tomoyo se esmeró
bastante en su *disfraz*. Sakura trae puesta una diminuta minifalda, unos
zapatos de tacón alto, una blusa escandalosa y una peluca rosa; además de
contar con un maquillaje bastante elaborado.
De
pronto un tipo conocido por todos, pasa por el club, observa al gran número
de chicas, y piensa:
-¡Ja,
ja, ja! ¡Ilusas!
Ese
sujeto tan malvado resulta ser Hyoga, que se muere por ver arruinado el
concurso. Entonces un grupo bastante llamativo pasa junto a él, son nada más
y nada menos que Akagi, Ryota y Kogure.
-¡AGGGHHH!-Piensa
Hyoga, con terror, pues los tres miembros del equipo Shohoku van vestidos de
mujer.
El
Gorila trae puesto un vestido sacado de quién sabe dónde y los otros dos
visten ropa de Haruko. Además usan pelucas rubias y onduladas. Ikki observa a
Sakura con atención, después a los tres travestís, y suspira; pero, a pesar
de todo, los deja pasar.
-Órdenes
son órdenes-Piensa el ex caballero del Fénix, y ahora portero de un club
extraño.
Sakura
entra al establecimiento junto al grupo de ‘rubias’, y mira a su
alrededor.
-¿Y
ahora?-Piensa la joven Kinomoto-No siento la presencia de ninguna carta
Clow...
-Disculpa,
¿estás sola?-Pregunta Ryota.
-Ehhh...Sí...-Responde
la niña, sorprendida ante la voz grave de esa rubia desconocida.
-Si
quieres puedes sentarte en nuestra mesa—Dice Kogure, o la güera de lentes.
-Tenemos
reservación-Agrega la rubia Gorila.
Sakura
ríe un poco, pero acepta. Los cuatro se sientan muy cerca del escenario y
esperan. Entonces Ojo de Águila aparece en el escenario, trae puesta una boa
de plumas rosa y un traje negro.
-Buenas
noches y bienvenidas al Club Arcoiris. El concurso para elegir a Mr. Animesco
comenzará dentro de poco, pero antes...Nuestro prestigiado club tiene el
honor de presentar a...¡Los meseros calenturators! ¡Aplaudan, por
favor!-Exclama el hombre de cabello rosado, antes de desaparecer tras el
escenario.
Todas
las presentes comienzan a gritar como locas, excepto Sakura y sus ‘amigas’
rubias.
-¿Qué
será eso?-Piensa la inocente Kinomoto.
Ahora
volvamos a la entrada del Club, donde Ikki pelea con tres chicas, conocidas
por todos.
-Lo
siento. Pero su amiga no puede entrar-Murmura el antiguo caballero del Fénix.
-Pero...Señor...-Murmura
Anaís.
-¡AAHHH!
¡POR FAVOR! ¡TIENE CATORCE AÑOS!-Chilla Marina, completamente desesperada,
pues se muere por ver el show de los meseros.
Ikki
observa a Lucy fijamente, ríe un poco, y dice:
-Se
ve como de once años. Jar, jar, jar...
Tomoyo
observa la pelea y no puede evitar reír un poco, después de todo, Ikki dejó
pasar a una niña de diez años sin darse cuenta...
Ahora
volvamos al escenario, donde un grupo de MUY bien dotados muchachotes acaba de
aparecer. Los gritos de las espectadoras aumentan de intensidad, y se vuelven
más desesperados. Serena y sus amigas son las que más gritan. Aunque
Shampoo, Nabiki, Ukyo y Kodachi no se quedan atrás. Las luces dejan de
parpadear y el escenario es completamente iluminado. Humo de color rosa inunda
el espacio. La música se vuelve aún más pegajosa. Los ojos de Sakura se
abren de par en par. Y los cuerpos de cuatro muchachos, vestidos de meseros,
se mueven con ritmo. Ellos son Shiryu, Touya, Seiya y Zafiro. Las prendan caen
hasta que los bailarines quedan envueltos sólo por una servilleta, que está
enrollada alrededor de las cinturas de cada uno.
-¡¿Con
que este era el trabajo nocturno de mi hermano?!
¡¡NO LO PUEDO CREER!!-Piensa Sakura, completamente sonrojada, al ver cómo
su hermano y el resto de los
bailarines bajan del escenario y se acercan a las mesas.
Shiryu
se acerca a la mesa de las Sailor Scouts. Mina grita con emoción y se
abalanza sobre el bailarín. Lita y Rei la imitan. Serena ríe tontamente y le
da un sorbo a su bebida exótica. Michiru también está ahí pero, como todos
sabemos, a ella no le interesan los hombres.
Seiya
baila para Akane y las demás. Shampoo y Kodachi bailan descaradamente con él,
Ukyo grita por la emoción, pero no se atreve a hacer nada más. Akane sólo
se sonroja y ríe.
Por
otro lado, Zafiro baila para Bulma y Milk. Mientras la esposa de Goku le
muestra al bailarín sus atributos para la danza, Bulma saca billetes de su
bolso y los introduce en la servilleta del guapérrimo hombre, el cual sólo
suspira y piensa:
-Odio
mi vida.
Sakura
observa a su alrededor con terror, jamás había visto nada como eso, y no se
da cuenta cuando su hermano se acerca bailando hasta donde está ella. Al
verlo, la joven Kinomoto ahoga un quejido de terror. Touya se confunde, al ver
que ninguna de ‘las’ cuatro le hace caso, y decide usar una de sus tácticas
para sacar más dinero a la audiencia, se lleva las manos a la servilleta y
está a punto de quitársela cuando...
-¡¡NOOOOO!!
¡No hagas eso!-Grita Sakura, acercándose a su hermano y tomando sus manos.
La
joven Kinomoto mira a Touya, completamente avergonzada, y piensa:
-Oh...Oh...Ojalá
no se haya dado cuenta...
-¿Sakura?
Qué demonios estás haciendo aquí-Murmura el guapote Kinomoto, con voz vacía.
Entonces
Ryota decide interrumpir:
-Déjala
en paz, ella puede ir a donde le dé la gana.
-Sí-Dice
el Cuatro Ojos.
Touya
observa a ‘las amigas’ de su hermana, confundido, y pregunta:
-¿Estas
cosas son tus amigas?
-He...Hermano...-Murmura
Sakura, sin saber qué hacer.
El
Gorila decide darle su merecido al odioso bailarín, cuando Reiko Mikami
aparece, abraza a Touya por la cintura y lo obliga a bailar en su mesa.
-¡Baila
para mííí!-Exclama Mikami, con emoción.
Touya
no tiene más remedio que obedecer, pero antes de irse, dice:
-¡Vete
a la casa, Sakura!
La
joven Kinomoto ríe nerviosamente hasta que su hermano desaparece entre una
multitud de mujeres en celo, y piensa:
-No
me iré hasta que atrape la carta del descaro...Que por cierto hay bastante
por aquí...ˆ_ˆ’
Así
es, por fin hay acción en esta historia...¿Qué sucederá? ¿Superará
Sakura el trauma de tener un hermano tan ‘exótico’? ¿Cumplirá Hyoga su
venganza? ¿Quién ganará el concurso? Pronto lo sabremos. ˆ0ˆ