Capítulo 7: Azrael, el ángel de la Muerte

(Kaori Sake)
Kaori salió inmensamente confundida del Fruit Parlor, miró su reloj, eran las siete en punto.
-¿Y ahora qué?Pensó Kaori mientras suspiraba tristemente.
De pronto Kaori vio una sombra sobre el piso, miró rápidamente hacia arriba y descubrió una silueta sobre el techo de un edificio.
-¿Qué es?Murmuró Kaori intrigada.
La silueta desapareció de pronto entre las sombras, sin dejar rastro alguno.
Kaori sacudió la cabeza un poco y miró hacia el piso. Después se dirigió a casa. Cuando caminaba por el parque No. 10, sintió como alguien la seguía. Kaori apresuró el paso y la persona que la seguía hizo lo mismo. Desesperada, Kaori miró hacia atrás con ojos desafiantes.
-¿¡Quién eres tú y qué quieres!?Preguntó Kaori de mala gana.
La persona que había estado siguiendo a Kaori era un joven siniestro, alto, de cabello negro hasta el hombro y ojos grises. A primera vista parecía desagradable, pero viéndolo bien, era bastante guapo y atractivo.
-¡¡Qué guapo!!Pensó Kaori sorprendida al observar detenidamente al joven que tenía frente a ella.
El joven siniestro miró fijamente a Kaori, con expresión seria. Después dijo con voz lenta:
-Tú eres Kaori Sake, ¿no?
Kaori tragó saliva y después preguntó tímidamente:
-Así es. ¿Y tú eres...?
-Mi nombre es Azrael.Murmuró el joven sin mucha emoción.
-¿Azrael?Preguntó Kaori intrigada¿Qué tienes que ver conmigo?
Azrael miró a Kaori tranquilamente, se sentó en una de las bancas del parque y dijo:
-Hace poco conociste a un sacerdote llamado Heliot, ¿verdad?
-Así es...¿Pero cómo puedes saberlo?
Azrael miró a Kaori a los ojos y murmuró:
-Yo puedo capturarlo para ti.
Kaori observó desconfiadamente a Azrael y preguntó:
-¿Y qué me pedirías a cambio?
Azrael se levantó de la banca, caminó lentamente hacia Kaori y murmuró:
-Carne y sangre.
Kaori frunció el ceño al escuchar tales palabras. ¿A qué se referiría Azrael?
-¿A qué te refieres con eso?Preguntó Kaori confundida.
Azrael mostró una sonrisa casi imperceptible y murmuró:
-Entrégame la carne y la sangre de los futuros gobernantes de la Tierra y de sus guardianes, de ésta manera Heliot será tuyo para siempre.
-¿Qué te hace pensar que quiero poseer a Heliot?Preguntó Kaori contrariada.
Azrael tomó un poco de aire y dijo con voz aburrida:
-Heliot representa todo lo puro y hermoso de tu vida. No puedes negarlo, haz soñado con él varias veces, pero hasta hace poco pudiste intercambiar palabras con él. Con Heliot a tu lado, podrás olvidar tu pecado.
-¿¡Cuál pecado!?Preguntó Kaori molesta.
Azrael miró a Kaori y respondió secamente:
-Dentro de muy poco asesinarás a muchas personas inocentes. ¿No te parece eso un grave pecado?
-¡¡Cállate!! ¡Es absurdo lo que me pides! ¡Me estás pidiendo que cometa ese pecado para poseer a Heliot!Gritó Kaori al borde de la histeria.
Azrael volvió a sentarse en la misma banca donde se había sentado antes, suspiró y dijo con voz aburrida:
-De todos modos terminarás haciéndolo. Esa es tu misión. Yo no tengo nada que ver en eso...Sólo te estoy dando la oportunidad de limpiar tu pecado.
-Tiene razón...Pensó Kaori después de varios minutos de silencio.
Kaori le dio la espalda a Azrael y murmuró tristemente:
-Está bien. Tendrás lo que quieres. Pero deberás esperar un poco...aún falta un poco de tiempo para que complete mi misión.
-Excelente decisión. Tendrás a Heliot esta misma noche, te lo prometo.Dijo Azrael mientras reía un poco.
Kaori sintió como las palabras de Azrael entraban en su cabeza y le causaban un profundo dolor. Entonces miró hacia atrás... Azrael había desaparecido.