Capítulo 7: ¡Alguien trata de detenernos!

Akane y los demás continuaron su camino, con Kuno al frente.
-¿Falta mucho, Kuno?-Preguntó Kodachi con voz molesta, pues el fuerte sol había comenzado a molestarla.
-Estamos a punto de llegar...-Murmuró el joven Tatewaki.
Nadie se dio cuenta, pero una persona había estado siguiéndolos muy de cerca...
-¡Ja, ja, ja! ¡Aún no se han dado cuenta de mi presencia! ¡Ñaca-ñaca!-Dijo esa persona, que resultó ser el degenerado Happosai, quien quería encontrar a Ranma para sus perversas intenciones.
-¿No escucharon algo?-Preguntó Moose.
-No-Dijeron todos.
-Qué raro...-Murmuró el cegatón.
Entonces una gigantesca bomba Happosai apareció frente a ellos.
-¡¡WAAAA!! ¡¡UNA BOMBA!!-Gritó Kuno con desesperación.
-¡Hagan algo...WAJAJAJA!-Gritó Kodachi antes de reír como loca.
Akane hizo a un lado a los hermanos Kuno y le dio una patada a la bomba, lánzandola muy lejos.
-Nos salvamos...-Pensó Akane mientras se secaba el sudor-¿Pero qué estaba haciendo una bomba del maestro Happosai en el camino?
De pronto una molesta voz se escuchó por los alrededores:
-¡¡AKANE!! ¿¿¡Cómo te atreviste a arruinar mi brillante plan!??
-¡Pero si es el maestro Happosai!-Exclamó Akane con terror.
Entonces el viejo rabo-verde apareció frente a nuestros héroes, parecía muy enojado....
-¡¡Nunca encontrarán a Ranma, jajajajaja!!-Exclamó Happosai siniestramente.
El terror se apoderó de los amigos y enemigos de Ranma...excepto de Shampoo, quien sacó algo de su equipaje mientras decía:
-No se preocupen. La abuela me dio algo para estos casos...
Todos la miraron atentamente mientras se acercaba a Happosai y le ofrecía un juego de ropa íntima. El anciano asqueroso quedó encantado:
-¡¡Ohhhh!! ¡¡Qué bonito!! ¡¡Es muy suave!! ¡¡Es maravilloso...!! ¡¡Es...!! Zzzzzzzz....Zzzz....ZZzzz...
De pronto Happosai se quedó profundamente dormido.
-¡¡Shampoo!! ¿Cómo hiciste eso??-Preguntó Ukyo.
-¡Muy fácil! Esas eran las prendas encantadas de la antigua secta Budokai. Cualquier hombre que las toque caerá en un profundo sueño por tres días-Respondió Shampoo tranquilamente.
-¡Bien! ¡Sigamos!-Exclamó Kuno.
Nuestros amiguetes siguieron avanzando por la montaña, hasta que se toparon con algo muy extraño...
-¿Qué es eso?-Preguntó Akane.
-Parece una señal de advertencia...-Dijo Ukyo.
Al lado del camino había un enorme letrero que decía: "ADVERTENCIA: TODO AQUEL QUE INTENTE ENCONTRAR A RANMA TENDRÁ GRAVES PROBLEMAS. DE AQUÍ EN ADELANTE EL CAMINO ESTARÁ REPLETO DE ARMAS MORTALES. CON AMOR: ????"
-¡¡Pero que tontería es esa!! ¡¡¿Cómo se atreven!!?-Exclamó Kodachi ofendida.
Kuno destrozó el letrero y exclamó:
-¡¡No hay que dejarnos intimidar...hay que seguir!!
Pero Kuno no había dado ni un paso cuando cayó en una trampa.
-¡¡Sáquenme de aquí!!-Gritó Kuno con desesperación al caer en el profundo hoyo.
-Yo te ayudaré, hermano...-Dijo Kodachi mientras se acercaba a la trampa, pero entonces pisó una mina que estaba entre el pasto y salió volando-¡¡¡WAAAAAAAAAAAA!!! ¡¡Encuentren a Ranma, yo volveré pronto...WAJAJAJA!!
Akane, Ukyo, Shampoo y Moose observaron la extraña escena y decidieron continuar sin ayudar a Kuno...
-¿Creen que esté bien que lo dejemos ahí?-Preguntó Akane.
-La hará bien quedarse ahí un rato-Dijo Ukyo felizmente.
-Lo sacaremos cuando regresemos-Dijo Moose.
Pasaron cinco minutos y una enorme jaula cayó encima de Moose.
-¡¡WAAAAA!! ¡¡Sálvenme!!-Gritó el cegatón con desesperación.
-Hay que dejarlo ahí-Dijo Shampoo-Lo sacaremos cuando regresemos con Ranma...
-Está bien-Dijeron Akane y Ukyo.
-¡¡Shampoo, mi amor, no te vayas, no me dejeeeees!!-Gritó Moose con todas sus fuerzas.
Pero Shampoo no le hizo caso y siguió caminando, Akane y Ukyo la imitaron...