Capítulo XLI:

Sorpresas


La noche acabó rápidamente (dejando cientos de escandalosos misterios sin resolver) y ahora es un nuevo día. Son las 11:00 AM y la mayoría de nuestros héroes y heroínas están desayunando en el restaurante del hotel.

“¿Qué te sucede, Mina? Has estado rara desde anoche...”, pregunta Lita a su deprimida amiga rubia. Ambas están sentadas en la misma mesa con Serena, Ami y los hermanos Kou. La diosa del amor observa tímidamente a su alrededor y suspira. “¿Dónde estará Heliot?”, piensa. “¿Mina?”, insiste Lita. “Hablaremos después”, murmura la chica rubia, con voz extraña. Ami y Taiki continúan charlando; Serena, Seiya y Lita cambian impresiones sobre la comida y Yaten está completamente en la Luna (?).

Por otro lado, el profesor Tomoe habla seriamente con su novia Setsuna: “Perdóname, pero estoy preocupado por Hotaru y lo mejor será que...Dejemos de vernos...” La mujer peliverde se sonroja profundamente, y exclama: “¡Pero...Soichi...! ¡No!” El hombre rubio se levanta y, antes de alejarse, murmura: “Lo siento mucho...”. Setsuna lo ve partir, se cubre los ojos y comienza a llorar, discretamente. “Por lo menos hubiera pagado la cuenta antes de irse...”, piensa.

Antes de salir, el profesor Tomoe pasa junto a una pareja y se siente algo confundido. “Esa chica se parece mucho a Hotaru...Debo buscarla. Hace mucho que no la veo”, piensa, sin darse cuenta de que aquella joven es en realidad su hija, y que está con el guapísimo Zafiro. La insensible Hotaru ni siquiera mira a su padre.

Haruka y Michiru están sentadas junto a la ventana. La ‘varonil’ chica rubia bosteza sin parar, pues anoche estuvieron despiertas hasta bien entrada la mañana. “¿Tienes mucho sueño? Si quieres podemos regresar a la habitación...”, dice Michiru, al ver a su pareja tan cansada. Haruka asiente y llama al mesero para pedirle la cuenta. “Sólo quiero dormir un rato”, murmura.

Neflyte está desayunando, solo, en una esquina del restaurante. Está realmente pensativo, tanto, que ni siquiera espía a Ami como otras veces.

Luna y su familia también están por ahí, felices, pues al fin pueden vivir ‘decentemente’, no como unas simples mascotas. Artemis está de un excelente humor y charla con la pequeña Diana. Sin embargo, la bella Luna piensa intensamente en lo sucedido la noche anterior...Yaten y ella son amantes. ¡Wooo! ¡Qué escándalo! *_*

Ahora tratemos de aclarar los demás misterios...

Lita también piensa detenidamente en algo, en Misha. Pues hace poco sucedió ‘algo’ realmente escandaloso entre ambos. Pero, desde que se separaron la noche anterior, Lita no ha vuelto a verlo ni ha sabido nada de él. Teme que lo sucedido entre ambos sólo haya sido una aventurilla.

Darien y su nueva novia, Saori, también están por ahí. La joven de cabello castaño no puede creer que al fin esté al lado de su amado e idolatrado compañero de clases. Por lo visto todo va bien entre ellos, para desgracia de todos los fans de Serena y Darien.

Mimette y las demás brujas entran al restaurante, todas tienen unas ojeras gigantescas sobre el rostro. Se ve que anoche la pasaron de maravilla. ˆ_ˆ’

Rei, Nicolas, Andrew y Unazuky están en la mesa contigua a la de Serena y compañía, todos parecen muy felices, a pesar de que la joven pelirroja tiene el corazón hecho ‘chicharrón’.

Ahora volvamos con Mina Aino, que está completamente confundida por lo de Heliot. No puede creer que su primer novio la haya dejado tan rápido. “¿Por qué lo hizo?”, piensa la chica rubia, tristemente, y sin comprender nada. De pronto, todos en su mesa dejan de hablar, pues Rini acaba de llegar, y no está sola. Al ver aquello, los ojos de Mina se abren de par en par. “¡¡NO PUEDE SER!!”, piensa la diosa del amor, tratando de no llorar. Lita coloca su mano sobre el hombro de su amiga rubia, y traga saliva. Obviamente, Heliot viene con Rini, ambos están tomados de la mano. Sucede que anoche ambos se encontraron en el hotel y aclararon las cosas. El (supuesto) sacerdote de Ilusión le pidió perdón a Rini y viceversa. “¡Hola a todos!”, dice la bellísima chica pelirosa, poco después se sienta junto a Serena. Heliot la imita, ignorando la insistente mirada de Mina. “Todo se paga en esta vida”, piensa la pequeña dama, mientras sonríe cruelmente y observa a la diosa del amor.

Oh Cielos...Qué cosas...¿Qué pasará en la vida de nuestros amigos (y los no tanto)? No tengo idea. -_-’