Capítulo XXXIV:

La desaparición de Ami


“¡¿Qué dices!?”, pregunta Serena, con preocupación. Lita mira fijamente a su líder, y exclama: “¡Qué bueno que regresaste, pero...tenemos que encontrar a Ami!” Todos asienten y salen corriendo del restaurante, claro, sin pagar. “Póngalo en la cuenta de Darien Chiba”, le murmura Seiya a un mesero antes de salir.

Mientras tanto, en el otro extremo del restaurante:

“¿Quién es Ami?”, pregunta Saori. Darien frunce el ceño, y piensa: “¿Otra desaparición? ¡Hasta cuándo van a dejarme tranquilo!” Sin responder la pregunta de su ‘amiga’, el supuesto novio de Serena sale corriendo del restaurante, sin mirar atrás y sin pagar. Así que Saori tiene que contribuir a la enorme cuenta con sus ahorros.

Serena y sus amigos se han detenido en la recepción del hotel. “Nadie vio a Ami salir o entrar de la habitación...”, murmura Lita preocupada. “No te preocupes, te aseguro que la encontraremos”, dice Mina, tratando de parecer alegre. Heliot observa a su hermosa diosa del amor, y piensa: “Es tan...tan...maravillosa”. Serena mira a su alrededor, después se acerca a sus amigos, y pregunta en voz baja: “¿Creen que Neflyte la haya raptado?” Lita, Mina y Rei recuerdan el vergonzoso suceso ocurrido días atrás en el Coco Bongo; y se sonrojan profundamente. “Es muy posible...”, murmura Lita, preocupada. Mina comienza a gritar: “¡Oh, no! ¡Tenemos que hacer algo antes de que ese acosador de menores le ponga las manos encima...! ¡Pobrecita Ami!” De pronto el mencionado sujeto aparece diciendo: “¿Qué le pasó a Ami?” Todos lo miran y exclaman al mismo tiempo: “¡Pero si es NEFLYTE!” Mina lo amenaza con el dedo, al tiempo que grita: “¡No te hagas el inocente! ¡Dinos dónde la tienes!” Neflyte mira a su alrededor, completamente confundido, y siente la asesina mirada de todos sobre él.

Entonces Rubeus pasa junto a ellos, y dice: “Si buscan a su amiga, la de pelo azul, está en el hospital Papaya”. Todos lo miran fijamente, pero no lo reconocen, porque trae puestos unos lentes rojos, y se hizo trencitas en todo el pelo. “¿Cómo...cómo lo sabes?”, pregunta Serena, confundida. Rubeus alza una ceja, mientras dice: “Hace como dos horas su amiga salió a nadar. La muy...tonta se alejó bastante de la playa y estuvo a punto de ahogarse. Yo lo vi todo”. Mina se acerca a Rubeus y le coquetea al instante: “¡Oh, muchas gracias!” Heliot no puede evitar sentirse triste y engañado. “Ese tipo me parece conocido...”, le murmura Rei a Lita.

De pronto Darien aparece en la recepción, todos lo miran con recelo, sobre todo Serena y Seiya. Rubeus aprovecha la confusión para quitarse de encima a Mina y escabullirse hacia el sauna. “Y...¿Dónde está tu amiguita?”, pregunta Yaten, con curiosidad. Darien gruñe un poco, se acerca a Serena, la sujeta fuertemente por el brazo y la lleva fuera del hotel. “¡Pero qué le pasa a ese sujeto!”, exclama Yaten, molesto. Lita alza los hombros y Mina suspira un poco. “Parece que Serena y ese sujeto están a punto de terminar”, dice Nicolas. Rei mira a su novio, y desvía la mirada, un poco aburrida. Heliot observa cómo Serena y su pareja discuten, a través de la puerta de cristal, y sus ojos se entristecen un poco.

Haruka no puede soportar estar parada ahí ni un minuto más, pues Andrew la mira insistentemente. “Ejem...¿No les parece que deberíamos ir al hospital Papaya?”, pregunta la ‘varonil’ chica rubia. Lita asiente, y dice: “¡Es cierto, Haruka tiene razón!”. De esta manera nuestros héroes (a excepción de Darien y Serena), salen del hotel y suben en diferentes taxis para llegar al mencionado centro clínico.

Mientras tanto, Darien y Serena siguen peleando...

“¡Dime la verdad! ¿¡Acaso me engañas con ese tal Seiya!?”, grita Darien, al borde de la histeria. Serena está furiosa, y exclama: “¿¡Y qué me dices de tu ‘amiga’ Saori!? ¡Puedes quedarte con ella, no me importa!” Después la chica rubia toma un taxi y sale huyendo de ahí. Darien se queda realmente indignado, junto a la puerta principal del hotel, tragándose su furia. Entonces Saori sale del hotel, se acerca a su ‘amigo’ y le toca el hombro, mientras pregunta: “¿Estás bien?” El supuesto novio de Serena se da la vuelta lentamente, mira a Saori y, con voz vacía, pregunta: “¿Quieres ser mi novia?” Para desgracia de Darien, justo en este momento aparece su futura hija (qué raro se escuchó eso): Rini, acompañada de su siniestra amiga: Hotaru. “¡¿QUÉÉÉÉÉÉ?!”, grita la pequeña dama histéricamente. Darien la mira, sus ojos están llenos de terror, pues se había olvidado de ella por completo.

Ahora veamos qué pasa en el hospital Papaya. Nuestros amigos se encuentran a la entrada del lugar, esperando a Serena. “¿Qué le pasará a Darien últimamente? Jamás lo había visto tan enojado...”, murmura Mina, pensativa. “A lo mejor ya tiene a otra”, dice Rei, un poco molesta. Seiya sólo escucha la conversación con aire molesto, Haruka lo mira y ríe un poco, Michiru le da un codazo, y susurra: “No seas tan cruel”. Setsuna y el profesor Tomoe están un poco alejados de los demás. “Hotaru...”, piensa el profesor, arrepentido.

Cinco minutos después, Serena llega. Tiene los ojos un poco rojos, se ve que ha llorado. “¡Ese maldito!”, piensa Seiya furioso al ver a su ‘adorado bombón’ en ese estado. “Entremos”, murmura Serena, sin mirar a nadie. Sus amigos sólo asienten y la siguen. Pero todos se detienen, porque se han topado con Ami en la entrada. “Hola chicos”, dice la joven de cabello azulado, alegremente. “Pe...Pero...¿Qué no estabas internada?”, pregunta Mina, sorprendida. “Estabas a punto de ahogarte en la playa, ¿no?”, pregunta Yaten, con su usual falta de tacto. Ami se sonroja un poco, y dice: “¡No, no!” Lita se acerca a ella, y pregunta: “¡¿Entonces qué pasó?! ¡Nos tenías muy preocupados!”. Ami observa a sus amigos y se siente un poco confundida. “¡Un tipo nos contó que habías ido a nadar, que te habías alejado mucho de la playa y que habías estado a punto de ahogarte! ¡También nos dijo que estabas aquí!”, exclama Mina histéricamente. Entonces Ami se apresura a aclarar la situación: “No, no...Lo que pasó fue esto...Estaba leyendo en la habitación cuando escuché unos gritos. Salí al balcón y vi a la señorita Mónica ahogándose en el mar. Salí corriendo del hotel para ayudarla...Y así fue como llegué aquí. La señorita Mónica es la que está internada, no yo”. “¿Y está bien?”, pregunta Serena. “Sí, no le pasó nada grave. Será dada de alta mañana”, responde Ami. Todos lanzan un suspiro de alivio y miran el reloj, ya son las 10:30 pm, así que deciden ir al Coco Bongo. “¿Quieres ir?”, le pregunta Lita a Ami. La chica de cabello azul lo piensa un poco. “¡Vamos! ¡Será muy divertido!”, exclama Serena alegremente. De esta manera Ami es convencida y todos se dirigen al mencionado lugar.

¿Qué pasará...? ¡Ah! ¡Esperen un momento! ¡Neflyte acaba de llegar al hospital! “¿Dónde está la chica que estuvo a punto de ahogarse en la playa hace unas horas?”, pregunta el pobre hombre a una de las enfermeras. “Está en la habitación 32”, responde la practicante. “¡Gracias!”, exclama Neflyte, corriendo hacia la mencionada habitación, pero cuando entra, se queda paralizado. “¡Esa no es Ami!”, piensa Neflyte con terror al ver a la mujer pelirroja, sonriéndole de una manera sugestiva desde la cama.

¿Qué hará Rini respecto a su infiel padre? ¿Saori aceptará la propuesta de Darien? ¿Kobayashi y Leika se harán novios? ¿Qué sucederá con Neflyte y Mónica la soñadora? ¡¡Pronto lo sabremos!!